El sistema de climatización óptimo debe ser el más saludable desde todos los aspectos.

Nuestro principal objetivo siempre ha sido y será cuidar a nuestros clientes.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) la salud se define como un estado de completo bienestar físico, mental y social, es decir, no solo hace referencia a la ausencia de enfermedad si no que también incluye la eficacia funcional del organismo.

En conclusión, hay que cuidar la salud física, pero también la “salud mental” o equilibrio entre las personas y su contexto, la “salud medio-ambiental” o cuidado del entorno en el que desarrollamos nuestra vida habitual y la “salud económica” o asignación eficiente de nuestros recursos monetarios.

Para conseguir un ambiente realmente confortable debemos buscar el equilibrio entre todos los factores que pueden condicionar o modificar este estado de bienestar, dándole prioridad a aquellos que resultan determinantes según destino y uso.

El primer paso para conseguir la mejor climatización es una planificación adecuada. No nos referimos a los casos en los que partimos desde cero, resulta evidente que en una vivienda en proyecto, tendremos la mejor oportunidad para incorporar en su construcción los elementos que nos permitan conseguir las mejores condiciones para obtener una vivienda saludable, cómoda y confortable.

A día de hoy, la situación más frecuente es que tengamos una vivienda ya construida, con una transmitancia térmica definida por sus materiales constructivos, con una orientación y distribución también ya definidas y que serán determinantes en la ventilación. En resumen, debemos evaluar adecuadamente la situación de partida y buscar las soluciones especificas para ese espacio, el sistema de climatización perfecto no es el más caro, ni el de la marca más famosa, ni el más potente, ni el que le va de “fábula” a nuestros amigos… el sistema de climatización perfecto es el adecuado para cada espacio, el adecuado para tu espacio.

Las soluciones para climatizar un espacio tampoco serán las mismas en el caso de una vivienda familiar y sus diferentes tipos (apartamento, ático, dúplex, pareada, adosada, chalet, mansión, etc..) que para un evento con ubicación provisional (carpa) o para un negocio (oficina, restaurante, hotel, comercio, supermercado, etc…), aunque estos últimos cuentan con la ventaja de que siempre recurren a nosotros, los instalados profesionales para climatizar sus instalaciones.

Por último, recordaros la importancia de la elección del sistema y equipamiento de climatización, el mercado ofrece numerosas alternativas, pero debemos tener presente que la inversión en climatización requiere posteriormente de una coste energético para su mantenimiento.

Seleccionar adecuadamente uno u otro equipamiento, o incluso sistemas mixtos, será lo que nos permita obtener la mejor relación rendimiento-inversión-mantenimiento para climatizar de forma saludable nuestro espacio.